Mejora de la productividad con instalaciones más “eficientes”
En este post nos referiremos de nuevo al ejemplo del café anteriormente descrito en el post “Desayuno Lean”.
Vamos a ver dos ejemplos de posibles mejoras por adquisición de medios de producción más eficientes y a tener en cuenta qué se debe valorar a la hora de tomar la decisión de adquirirlas, ya que alterarán nuestros flujos productivos. Los resultados del segundo ejemplo, puede que os sorprendan.
Adquisición depósito con grifo de leche fría
Esta solución presenta un depósito de leche, que podemos situar más cercano al microondas y que, mediante un simple movimiento de bajar una palanca, realiza la acción verter leche. Eliminamos el roscado del tapón, por lo que presenta no sólo una reducción de tiempo, sino la eliminación de 2 tareas.
Sin duda es una mejora que debemos adaptar. Elimina tareas, reduce el Takt time y permite al operario disponer de mayor tiempo para aprovechar en otras preparaciones. Para conocer la rentabilidad del nuevo equipamiento, hay que hacer un balance coste/reducción de tiempo inversión recuperación coste.
Con esta inversión conseguimos una reducción a 80 segundos la tarea. Ya que se quita latarea 2 y la 3 pasa a ser abrir la llave y cerrarla. Además las tareas 12 y 13 se eliminan.
Adquisición de una microondas de mayor capacidad
Suponiendo que nuestro negocio del café esté aumentando, se ha conseguido contactar con un proveedor de microondas para intentar mejorar el tiempo de calentamiento del café, ya que nos parece muy largo y optimizable.
Dicho proveedor nos dice que para un solo café, el microondas no es tan potente y el tiempo es de 40 segundos, pero que si adquirimos uno más grande, podría conseguir calentar dos cafés en 70 segundos y otro modelo mejor conseguiría tres cafés en 100 segundo.
Un balance rápido arrojaría los siguientes datos:
Parece lógico pensar que reducir nuestro tiempo de producción es una gran ventaja, pero vamos a entrar en detalle de cómo sería la secuencia de tareas para el caso de dos cafés y a ver realmente como afecta a nuestro flujo.
1. Sacar la taza del armario → sacar dos tazas, 4 a 6 segundos
3. Poner tazas debajo de depósito y abrir llave
4. Verter la leche en la taza → verter dos veces, 8 a 16 segundos
5. Abrir microondas
6. Meter taza con leche → meter dos tazas 3 a 5 segundos
7. Calentar la leche → de 40 a 70 segundos
8. Rellenar con agua la filtradora de agua
9. Presionar botón de inicio para que la cafetera se vaya calentando
10. Sacar cápsula de café de caja
11. Abrir compartimento cápsula, ponerla en la cafetera, cerrar
14. Desechar la cápsula anterior y tirarla a la basura
15. Abrir microondas
16. Sacar la taza → sacar dos tazas, 2 a 4 segundos
17. Colocar taza debajo de la cafetera
18. Pulsar botón inicio de soltar café
19. Se vierte el café
20. Cerrar microondas
21. Sacar cápsula de café de caja
22. Abrir compartimento cápsula, ponerla en la cafetera, cerrar
23. Desechar la cápsula anterior y tirarla a la basura
24. Colocar taza 2 debajo de la cafetera
25. Pulsar botón inicio de soltar café
26. Se vierte el café
Café listo
Haciendo el diagrama de actividades vemos que hay un nuevo factor con el que no habíamos contado. Las tareas 21 a 24, que efectuabamos antes mientras calentabamos el café, son ahora realizadas con el producto en espera. Hemos generado un “stock intermedio” que nos está perjudicando.
No sólo estamos tardando más que individualmente, tras adquirir el nuevo microondas, sino que el tiempo para servir el primer café se alarga mucho, alejandonos aún más del modelo JIT y Pull que dicta el Lean.
En el caso del segundo microondas, la pérdida es aún mayor y la entrega del primer café se produce mucho más tarde. Con nuestro anterior método habríamos terminado hasta dos cafés. Con demanda de varios productos, habríamos perdido flexibilidad y empeorado nuestro plazo de entrega a cliente.
Cualquiera de los dos microondas es en nuestro proceso una mala inversión.
Es muy importante tener en cuenta que esto no significa que la compra no pueda ser una mejora, sino que no es una mejora según se encuentra el proceso en su estado actual. Lo que nos demuestra, es que los puntos en los que tenemos que mejorar es en la preparación de las máquinas, esas tareas 21 a 24 son en las que hay que mejorar y si se reducen, la inversión de la máquina puede generar cafés más rápido. Para optimizar esas tareas se puede utilizar la herramienta Lean SMED, que explicaré en otro post si me lo pedís en los comentarios.